29/04/2020
Tras largas décadas de progreso y bienestar al amparo del paraguas de protección norteamericano, de mutuas y beneficiosas relaciones comerciales y culturales, Europa se enfrenta ahora a una nueva realidad. Espectadora de un orden internacional en reconfiguración en el que no acaba de encontrar su sitio y convulsionada por la crisis sanitaria desencadenada por la COVID-19, de cómo gestione esta nueva realidad dependerá el futuro de la Unión Europea como actor relevante en un mundo pleno de incertidumbre.