18/07/2012
La Republica de Sudán del Sur celebró el pasado 9 de julio el primer aniversario de su independencia. El autor de este documento, Ignacio J. García Sánchez, Subdirector del IEEE, analiza como el país más joven de la Naciones Unidas, su miembro 193, celebraba este primer cumpleaños entre la alegría y la amargura de ver como los esfuerzos de la comunidad internacional para poner fin a una de las guerras civiles más largas y cruentas de la historia, mediante la formación de dos estados estables y cohesionados con grandes posibilidades de desarrollo por la riqueza en recursos energéticos, no tiene los resultados esperados.
El reparto de la riqueza generada por el petróleo, la coexistencia étnica y el contencioso de Abyei, son todavía heridas abiertas en la piel del, una vez, más extenso país del continente africano. Heridas que tardarán en cicatrizar, pero que la crisis económica del mundo en que vivimos puede obligar a cauterizar de forma más dramática.