08/01/2020
Las Fuerzas Armadas no se diferencian sustancialmente en los valores de las sociedades a las que pertenecen, por más que existan diferencias en cuanto a las actitudes. Esto las hace ser más proactivas por lo que su comportamiento tiende a una mayor congruencia. La preparación con la que cuentan sus miembros y su experiencia les dota de una gran capacidad de liderazgo, cautela en la toma de decisiones, resistencia al estrés e integridad y les hace de una gran utilidad en el mundo de la empresa civil a todos los niveles. Todo ello, y pese a su importancia, no se ha trasladado suficientemente al ámbito empresarial de nuestro país.
Documento elaborado por Federico Aznar Fernández-Montesinos, Analista del IEEE.