22/06/2017
La victoria de Donald Trump en Estados Unidos y el cambio de rumbo de su política exterior imponen nuevas reglas de juego y cambios en las alianzas geoestratégicas, que pueden erosionar los pilares del orden geopolítico que se diseñó tras la Segunda Guerra Mundial. La visión aislacionista de Trump puede suponer un riesgo pero a la vez una oportunidad para los distintos actores en el escenario internacional, en concreto para la Unión Europea, la cual puede consolidarse como un actor geopolítico internacional si previamente es capaz de resolver y fortalecer sus propias debilidades internas.
Documento elaborado por Beatriz Navarro Sanz.