02/05/2022
Durante el siglo pasado se construyeron nuevas ciudades para reemplazar a las capitales existentes. Por ejemplo, Estados como Brasil o Nigeria desplazaron sus centros de poder para hacer frente a un problema estructural surgido de la combinación de diferentes factores, como la superpoblación o la búsqueda del acceso a recursos básicos. El crecimiento exponencial de la población lleva aparejados unos requisitos de acceso a bienes necesarios —como recursos hídricos o hidrocarburos—, a lo que hay que sumar las consecuencias del cambio climático. Esta situación plantea en ocasiones un dilema sobre la conveniencia de desplazar geográficamente determinados núcleos urbanos, adaptándolos a requerimientos medioambientales.
Documento elaborado por Antonio Poncela Sacho. Comandante diplomado de Estado Mayor